UNA MIRADA DESDE CUBA

 
Colmena

FOTOS EN A FLOR DE PIEL

El próximo jueves 11 de marzo, a las 3 de la tarde, la sala Manuel Galich acogerá a la fotógrafa peruana Anamaría McCarthy, quien hablará a propósito de su exposición A flor de piel: antología de un autorretrato, que desde el viernes 12 a las 5:00 p.m., quedará abierta en la Galería Latinoamericana de la Casa de las Américas.

Según explica Nahela Hechavarría en las palabras al catálogo de la muestra, “sus imágenes son, entonces, estadios de conocimiento, en tanto el rostro, el cuerpo, el objeto refieren experiencias vividas o escenificadas, quimeras, incertidumbres”.

La especialista de la Dirección de Artes Plásticas de la Casa de las Américas apunta que “la fotografía le ha permitido (a McCarthy) revisitar la historia familiar e incidir en la construcción de la memoria” y agrega que “al apropiarse de fotos de sus antepasados (padre y abuelo respectivamente) e insertarse por voluntad como parte de la imagen, funda un nuevo recuerdo, íntimo, personal, irrepetible”.

Señala también que “el tema de la herencia, el legado transmitido de padres a hijos, pasa a ser central también en imágenes donde la relación con la madre (El amor en mi memoria, 1994) o la descendencia (Madre e hija, 2008), magnifican y proyectan el espacio de la memoria, lo heredado”.

A propósito del trabajo que la fotógrafa peruana realiza sobre su propio cuerpo, Hechavarría enfatiza que, al hacer esto, la artista “lo vuelve receptáculo, fuente, vehículo para el tránsito entre la realidad y la fábula”.

McCarthy, quien nació en Nueva York y desde 1973 reside en Lima, inició su trayectoria artística por manifestaciones como la pintura, la cerámica y el grabado, pero la fotografía atrajo su atención en 1987, año a partir del cual se ha dedicado exclusivamente a esa expresión visual, particularmente al desnudo.

Entre los momentos relevantes de la carrera de McCarthy figuran, en 1990, la medalla del 50mo. Salón Internacional de Fotografía del Japón, en Tokio, y el reconocimiento de la I Bienal de Fotografía de San Juan, Puerto Rico, en 1998. Asimismo, en 2001 publicó su primer libro de fotografía Memoria del cuerpo (Blume, Barcelona/Peisa, Lima).

Otro volumen consagrado a su obra, Fotografía corporal, fue editado en 2003 en Santiago de Chile por el Taller Experimental Cuerpos Pintados. En 2009, presentó en Lima su más reciente texto, Anamaria McCarthy Fotografías: 1990 – 2008.

Anamaría McCarthy ha representado a Perú en bienales y exposiciones internacionales como la I y la II Bienales de Fotografía de Sao Paulo, Brasil (1993 y 1995); Fotofest 1996 (Houston, Texas); Fotoseptiembre 1996 (México D.F.); la VI y la VII Bienales de La Habana , Cuba (1997 y 2000); Camerawork 1997 (San Francisco, California); Museo de Arte Moderno de Mérida, Venezuela (1998); El Museo del Barrio, Nueva York (2000); Cuerpos Pintados en Chile, Argentina y Brasil ( 2004 a 2006); Proyecto’ace, en el Centro Cultural La Recoleta y Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), Argentina (2008), entre otras.

Asimismo, sus obras forman parte de las colecciones privadas del Museum of Fine Arts, Houston, Texas; Fundación Kingman, Quito, Ecuador; Lehigh University Photographic Collection, Pennsylvania, Estados Unidos; Colección del Instituto de Cultura Puertorriqueña, San Juan, Puerto Rico; Centro Wifredo Lam de La Habana , Cuba; Museo de Arte de Lima, Perú; Instituto Cultural Peruano Norteamericano (ICPNA) de Lima, Perú y la Fundación América de Santiago, Chile.

ELEMENTOS, FUERZA Y COMPÁS POR CANADÁ

El Ballet Lizt Alfonso presenta sus espectáculos Elementos, Fuerza y Compás y Tablao, en una gira por más de 20 ciudades de Canadá..

A su paso por importantes plazas, la compañía cubana ganó los aplausos en los teatros Place des Arts, de Montreal, y Albert Rousseau, de Québec, señala un despacho de la agencia de noticias Prensa Latina.

En la cuarta oportunidad en que esta agrupación antillana gira por Canadá, se presentará además en las ciudades de St Albert, Calgary y Ottawa.

El Ballet Litz Alfonso sustenta su trabajo en la fusión de formas contemporáneas de la composición coreográfica, musical y teatral, y ha recorrido cerca de 30 ciudades de Holanda, México, Egipto y Canadá.

DE ALLÁ Y ACULLÁ

1.- Nunca es tarde si la dicha es buena, parece ser la divisa de Stevie Wonder, quien esperó 30 años para ir a recoger a París la medalla como “Comandante de las Artes y Letras”, de Francia que le fuera otorgada en 1980.

El músico norteamericano dedicó la medalla a su mamá fallecida hace cuatro años y durante la entrega el ministro francés de Cultura Fréderic Mitterand le dijo “llamé sólo para decir que te queremos”, aludiendo al estribillo de uno de los temas famosos del cantante “I just called to say I love you”

Wonder tiene 67 millones de álbumes vendidos y a sus 59 años goza del raro privilegio de ser considerado una leyenda en el universo musical.

"Llamé sólo para decir que te queremos", dijo el ministro francés de Cultura, Fréderic Mitterrand, al entregar el premio a Wonder, en alusión al estribillo de uno de los temas más famosos del cantante invidente ("I just called to say: I love you").

2.- Uno de los míticos nombres del quehacer musical de la legendaria orquesta La Fania, retorna al mundo discográfico cuando a mediados de abril se editen tres álbumes compactos y un DVD con una selección de selecciones de algunos de sus mejores momentos.

Bajo el título de Lo esencial de la Fania, saldrán esas producciones gracias a un convenio firmado con la Sony que le permite hacer suyo el catálogo del sello discográfico Fania, conocido hoy como Código e incluye a Kubaney con miles de temas interpretados por grandes artistas como Tito Puente, Celia Cruz y Eddie Palmieri, por solo citar algunos.

3.- El pianista Johnny Alf, considerado por algunos estudioso como el verdadero padre de la Bossa Nova, falleció en Brasil, a la edad de 80 años, víctima de un cáncer de próstata

Alf nació en Río de Janeiro en mayo de 1929 y como muchos músicos de su tiempo era un aficionado al jazz norteamericano, que influyó de manera decisiva en su posterior trabajo.

Sus canciones Rapaz de bem (Buen chico) y O Tempo e o Vento (El tiempo y el viento), creadas en 1955, son consideradas como joyas dentro del amplio repertorio de la Bossa Nova.

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