1, 2, 3, Grabando a Tony Pinelli


Muchos jóvenes solo le conocen como conductor y director del programa En primer plano que se emite por Radio Taíno de lunes a viernes a partir de las 4.30 p.m. Pero no recuerdan al periodista inconcluso que dirigió durante años un cuarteto antológico como Los Cañas. Arreglista de voces y compositor, también fue vicepresidente del Movimiento de la Nueva Trova en los años 70. Tony dio a conocer su arte en una veintena de países como intérprete y director de festivales musicales.

Escribir y dirigir programas de radio y televisión siempre fue una extensión de su labor como cantante, parte de su predisposición genética  como familia de artistas.

Ha ocupado distintos cargos relacionados con la industria del disco en la EGREM, Cubartista y Artex, a la vez que ha organizado y dirigido diversos proyectos culturales como son el Delirio Habanero y el Café Cantante del Teatro Nacional.

Como productor discográfico ha realizado variados proyectos musicales audiovisuales que le han proporcionado notoriedad como especialista en esta rama de la cultura. La vida le ha dado mucha experiencia para abordar  el tema del disco en las condiciones actuales de nuestro país, motivo suficiente para concertar esta entrevista en una fresca tarde de marzo en su apartamento del Vedado.

¿CUAL ES SU PERCEPCIÓN DE LA INDUSTRIA DISCOGRÁFICA ACTUALMENTE?

Se podría decir que es como una trampa en la que han caído hasta las transnacionales. Nadie previó lo que iba a ser Internet y tuvieron  que tomar medidas emergentes, porque cuando a ellos se les fue adelante  el asunto de bajar música de los puertos de Internet no les quedó más remedio que negociar de forma remedial, porque las leyes contra la piratería no preveían eso; el comercio  electrónico acabó con las formas tradicionales de la venta de discos.

La industria del disco estaba basada en que tú pegaras un número entre doce, diez o quince y los demás eran relleno. Hay discos y creadores excepcionales que  logren 8, 10 y la totalidad de los temas sean exitosos, pero eso es una rara avis, Unicornio de Silvio  o Caminos Verdes de Rubén Blades tenían hits  internacionales en casi todos sus temas, pero son excepciones. O sea, que una pieza musical te vendía un disco, pero ahora tú puedes bajar de Internet ese número favorito por lo que no necesitas comprar el disco, sobre todo por el precio exagerado del producto a partir del monopolio de las discográficas. La industria del disco es leonina, paga entre un 7 y un 12 por ciento hasta un 20 o 22 las mega - estrellas,  la gran ganancia es para la industria. Es verdad que también se paga otros conceptos a los orquestadores, los productores que ganan de 1 a 3 %. Pero la gran ganancia es para la disquera, el poder seleccionar la música que quieres oír directamente de Internet y conformar el disco al gusto de cada consumidor con todos los intérpretes y géneros al alcance de todos, sin sellos o compañías, cambió el concepto de manera radical, aunque haya quien prefiera la oferta completa, como es natural.

Lo cierto es que las ventas bajaron dramáticamente, al punto que quebraron varias compañías.

Aquí trabajamos para la EMI pero apenas comenzando, se produjo la debacle de la compañía española y se acabo el negocio con Cuba.

A pesar de todo, se sigue vendiendo el disco algunos dicen  que el futuro es el DVD pero cuando vas manejando no puedes situar tu atención visualmente y cuando vas a dormir lo que interesa es solo la música, así que no creo que el disco se acabe así como así, todo lo contrario.

EN 1992 LLEGARON LOS CD Y CAMBIO EL SOPORTE DE LA MUSICA  LOS PRODUCTORES EXTRANJEROS SE DEDICARON A PRODUCIR CON COMPAÑIAS ESTABLECIDAS EN EL PAÍS.

¿QUE HA PASADO CON ELLAS?

En primer lugar pienso que no hubo el suficiente estímulo de las autoridades cubanas para alimentar esa posibilidad de difundir nuestros artistas por el mundo, creo que hubo una posición un poco

inexperta e infantil de decir que esta gente se está llevando el patrimonio nacional y esto es un grave error: el patrimonio siempre se queda. Los royalties son los que se van. Pero si a ti te sirve para que los artistas cubanos sean famosos y reciban campañas publicitarias que nosotros por las necesidades del país no podemos invertir lo suficiente, pues bienvenidos sean. Yo creo que ese egoísmo infantil fue el que primó, como por ejemplo la compra del catálogo de Caribe Productions, que pagaron una millonada por un catalogo que ya estaba fiambre y en definitiva podían haberlo invertido en desarrollar nuevos artistas con todas las de la ley.
Entonces, yo pienso, que hay un error de concepto alrededor del disco. El disco hoy en DIA para que resulte tiene que ser integral, tu no puedes tener el disco del artista y las actuaciones en vivo y los derechos editoriales cada uno por diversas fincas, hoy en DIA no tenemos fuerza para manejar integralmente 10 artistas, es obsoleta esa forma de las empresas nuestras que tienen 700 artistas. En el Congreso de la UNEAC se habló mucho esto, y creo que se demostró que es imposible manejarlos todos.

Hay cosas que para la memoria histórica del país tienen que cumplirse, y son muy útiles, en el Centro Pablo de la Torriente Brau están grabando una cantidad de trovadores, creo tienen grabados más de 50, pero no puede promover a ninguno porque se necesita mucho dinero y esfuerzo para ser una estrella y no cabe duda de que en el mundo moderno el disco no basta, tiene que ser una campaña con todos los medios para que nazca una estrella.

A DIFERENCIA DE AÑOS ANTERIORES, CUANDO NO EXISTIA LA TÉCNICA DIGITAL, MUCHOS ARTISTAS MURIERON SIN GRABAR. AHORA GRABA CUALQUIERA, SE HA FACILITADO EL ACCESO AL ESTUDIO DE GRABACIÓN. PERO ADEMAS LAS VENTAS POR INTERNET LE DAN MAYOR CONTROL AL ARTISTA ESTABLECIDO SOBRE SU OBRA  Y ALGUNOS LO HACEN AL MARGEN DE LAS DISCOGRÁFICAS.

Los grandes artistas tienen su propio sello y editora musical y esto ha traído la editorialitis aguda, en nuestro medio se ve mucho eso en la música bailable, el mayor porcentaje son temas propios de los cantantes. No todo el mundo es compositor y aunque pueda lograr un número excelente, no implica que pueda hacer diez. Pero prima el criterio de que siendo sus propios temas cobra el derecho editorial y es un negocio que se suma a la posibilidad del artista, pero quedan muchos autores que no son intérpretes sin dar a conocer su obra.

Es un trabajo deficiente de la ACDAM y la Editora Musical, no hay una fonoteca nacional, ni grupo de scouts o promotores, de gente que se interese estudie y aplique el mercadeo y llamen, a artistas con propuestas de – por ejemplo - 12 temas que se ajusten a su estilo de diferentes autores y los puedan valorar para el disco y sugerir al orquestador incluso. En Cuba confundimos el director musical con el productor y son dos categorías diferentes, el director musical puede hacer todos los arreglos de un disco y tenemos productores que son buenos directores musicales pero no siempre es así. Para tal tema es mejor otro arreglista para lograr determinado efecto e impedir la uniformidad en el intérprete y con esta variedad pueda llegar a más segmentos de mercado. A veces por pura desinformación,  tropezamos con las corrientes de mercado en el diseño, los arreglos; muchas versiones muestran –a veces – que priman los deseos del productor de hacer la obra de su vida, más allá de la utilidad y los propósitos del disco. Con los diseñadores yo siempre estoy fajado por eso, ellos tienen un espacio muy reducido para dar el mensaje que el disco conlleva y su diseño, más allá de la gran obra plástica, tiene que lograr  la funcionalidad y que llame la atención. Tiene que haber uniformidad en una hornada de la discografía por eso se caracteriza una época. Las disqueras cubanas se mueven en dos sentidos: uno, la preservación de obras de arte que queden para la historia y puedan ser valoradas en el futuro y la otra lo que te alimenta la disquera, los artistas de moda que con sus ventas financian 3 o 4 de esas obras con valor cultural imprescindible pero sin salida en el mercado actual.

A veces gastamos más en los diseños de los discos que lo que logramos recaudar con su venta, no se saca cuenta. Yo recuerdo mi lucha en Artex con los economistas y otros funcionarios para que entendieran lo que es un fonograma porque no se entendía.

Nosotros vivimos de espaldas al mercado a pesar de que nuestro mercado potencial es uno de los más grandes del área, por ejemplo Puerto Rico tiene un per cápita de 4 discos al año por habitante, Cuba pudiera tener mas o menos el mismo promedio pero estamos hablando de 11 millones de habitantes.

Y sin embargo no se venden ni 300 mil discos al año, principalmente por el acceso al producto aunque ya se ha logrado bajar de precio los discos  a 5.00 cuc y ventas especiales en moneda nacional. El acceso al equipo reproductor permanece prohibitivo para la mayoría de los cubanos pero cualquier muchacho tiene un MP3 o un MP4, el cubano es un consumidor natural de música. Por otra parte hay un aspecto muy interesante: esta cualidad que debemos tener nosotros, de producir para la cultura  y memoria musical del país, debe tocar hondo en la conciencia de los especialistas y conjugarse de manera coherente con qué cosa es lo que se vende. Lo vendible no es lo que guste al que vende, sino al comprador, por eso es que resulta indispensable investigar el mercado para reducir los riesgos en la realización de la idea de los productores.

Tú en el mundo llegas a la mas importante disquera y pides ver al director de Arte y Repertorio y te recibe, le presentas tu proyecto y te pide lo dejes para estudiarlo y te responde si le interesa o no después de evaluarlo, no importa que tu seas un desconocido ellos buscan el éxito y cualquiera puede traerlo.

EN ESE CASO AHORA ESTARÍAN LAS EMPRESAS CUBANAS GRABANDO REGGUETON…

Claro pero también es que el regueton es un reflejo del medio ambiente en que se desarrolla la sociedad, por lo tanto tienes que explotar la moda no fajarte con ella. Y es el Instituto de la Música quien debe decir vamos a convocar a los principales hacedores de textos (letristas) para que los reguetoneros le pongan música a esos textos, no fajarse con ellos. El reguetón es contestatario porque la juventud siempre ha sido así, esa juventud disciplinadita y pelaíta cortico y la banderita en la mano, es mentira, eso no existe, debemos aceptar nuestra juventud con sus virtudes que tiene muchas, con su enorme preparación educacional que tiene o instructiva porque en la educación formal tenemos muchas cosas que mejorar.

Cuando tu ves a los muchachos de la UCI que es una élite de talento que van a despelotarse con el reguetón, por algo es, ese poder de convocatoria reúne a universitarios de cualquier escuela, no me puedo fajar con eso y menos sin armas. Porque tú dices voy a hacer una campaña donde los cantantes mas populares del país me canten cha cha chá, y las orquestas jóvenes con arrastre en la juventud canten cha cha chá. Una campaña bien pensada que a nosotros nos sería  más fácil porque nosotros tenemos un solo patrón que es el estado y bien pudiera funcionar si fuéramos capaces de lograr una sinergia entre las distintas instancias promotoras, pero desgraciadamente no veo madurez y no veo mente para llevar esto a cabo.

LA EGREM PERDIO EL MONOPOLIO DE LAS GRABACIONES EN LOS NOVENTA PERO LO ESTA RECUPERANDO AHORA…

Tiene presupuesto, fuerza, es la decana de las disqueras, la EGREM es la fonoteca nacional, en un momento dado todos los discos que existían fueron a parar aquí, a partir del archivo pasivo de la EGREM se hicieron muchos negocios en los años 80 y 90. Entraron muchas empresas extranjeras que diversificaron el mercado, no se cuidaron, se les hizo la guerra y se les exigió hasta que las aniquilaron. La diversificación de la producción es lo que te abre nuevos segmentos de mercado a nivel global. Siempre van a existir riesgos y se va a necesitar ojo alerta, pero la solución está en diversificar, porque Cuba padece de un problema bendito: tenemos más talento del que se puede manejar con las estructuras anquilosadas que aún mantenemos, aunque sabemos que ya no son eficientes.

Por Roberto Bello, fotos del autor

 

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